¿Electroluminiscente, LED o bombilla? ¿Qué tipo de iluminación es mejor?


Largo rato se lleva debatiendo sobre las gentilezas y desventajas de unos tipos de tecnologías para iluminar nuestros relojes, y otros. Estas tres son las tecnologías más utilizadas en el mundo de los relojes digitales (y también en muchos duales y analógicos), y todas ellas tienen sus pros y contras, sin embargo, intentando ser lo más justos posibles y equilibrados, ¿cual de todas es mejor?

En los últimos años los paneles electroluminiscentes (EL) copan la práctica totalidad de los lanzamientos en relojes digitales, desde las marcas más baratas, hasta los modelos más caros de G-Shock o Edifice. Pero, aparte de su comodidad y facilidad de visión, ¿realmente es la mejor? Veamos.



Principalmente hay que destacar varios factores: los paneles EL, al contrario que los LEDs y las antiguas «bombillitas», iluminan toda la superficie del reloj de un modo uniforme, e, incluso, se puede hacer que se ilumine totalmente la capa LCD o únicamente los números (como en el caso del SGW-100). En este aspecto, en calidad de iluminación, no tiene comparación ni rival.

Las bombillas fueron el primer recurso utilizado para iluminar los displays de los antiguos relojes, utilizadas como función «de último recurso», puesto que no había otra cosa. Por ello, no es raro que en algunos modelos de Casio de antaño, cargados de funciones, tuvieran de todo excepto iluminación. Las razones son de peso, y fácilmente de entender: las bombillas se pueden acabar fundiendo (si bien es cierto que, dado su tamaño y resistencia, es difícil que esto ocurra), además, su uso agota de manera brutal la energía de la pila.


Los LCD, y gracias a su tecnología de baja energía, no tienen ese defecto de agotar la pila tan acusado (si bien también suponen un consumo excesivo si abusamos de ellos), y, además, dada su tecnología, son prácticamente inagotables (teóricamente duran más que la vida del reloj sin perder luminosidad). No obstante comparte su «punto flojo», y el que más suele molestar a los defensores de los EL, con las bombillas: que no iluminan toda la superficie de manera uniforme, sino que iluminan desde la esquina donde suelen colocarse, disminuyendo su iluminación proporcionalmente por el resto de la superficie de manera notable. No obstante, sí iluminan más que las bombillas, permitiéndonos ver la hora sin muchas dificultades, aún en la más absoluta oscuridad.

Los paneles EL están formados por millones de cristales microscópicos que se disponen en las capas del display LCD, bajo el filtro polarizador, y entre sus características destaca en ser la tecnología, en la actualidad, que menos consume: en torno a un 75% hasta el 90% menos que cualquier otra fuente de luz. Además, pueden ser aplicados sobre cualquier tipo de superficie (tenga la forma que tenga e incluso sean planas o curvadas), tienen una eficiencia del 80% (es decir: el 80% de la energía que reciben la transforman en luz, sin pérdida, por ejemplo, en calor), son prácticamente irrompibles, se puede modificar su brillo según las necesidades (y hacerlos visibles bajo humo, niebla…), y no se utiliza, en su fabricación, ningún material peligroso.


Una de las «leyendas negras» que persigue a los paneles EL es que con el tiempo se acaban «desgastando». Sin tener en cuenta la obviedad de que todo se desgasta (las bombillas se acaban fundiendo, los LEDs reducen su emisión de luz hasta agotarse y los EL pierden su facultad de emitir luz), más aún con un uso intensivo, hay que admitir que esta «leyenda» tiene su parte de razón: un panel EL tiene una longevidad de unas 30.000 horas (dependiendo del brillo que en fábrica se le haya dado), mientras que un diodo LED tiene una vida de unas 50.000 horas (esto es: podría estar encendido constantemente durante seis años), es decir, casi el doble que los paneles EL. No obstante hay que hacer notar que los LEDs tienen esa vida de promedio, pero que llegado a ese punto no se apagan, sino que su iluminación decae un 70%, pero seguirán alumbrando (aunque ya de manera ineficiente, lógicamente).

Por lo tanto, y con todos estos datos, ya podemos responder a la pregunta de qué tecnología es mejor: sin duda, los diodos LED. Al menos por duración. Pero, ¿por qué se abandona esta tecnología? Pues por dos razones principales y de mucho peso (como comprobarás): los paneles EL son más amigables con el medio ambiente (algo a tener muy en cuenta), son más eficientes energéticamente (muy importante para un reloj) y son más «elegantes» y útiles, al poder iluminar todo el display además de poder ver la hora bajo la niebla, humo, etc. Los EL, por si fuera poco, son muy resistentes al agua, al contrario que los LED, cuyas partes pueden llegar a oxidarse.

Además, y siendo sinceros: 30.000 horas es más que suficiente tiempo de duración para un reloj, que, se supone, no deberíamos encender nada más que en ocasiones muy singulares (o lo que es lo mismo: no es nada recomendable activar funciones como la auto-iluminación (Auto BackLight), en aquéllos relojes que disponen de ello, como bien nos advierte Casio en sus manuales), y 30.000 horas son, ni más ni menos, que unos cuatro años de iluminación constante. Aun suponiendo que activáramos la iluminación de nuestro reloj durante una hora al día, para llegar a 30.000 horas (29.200 horas, exactamente), ¡tendrían que pasar 80 años! O lo que es lo mismo: dada la vida media de un panel EL, con la iluminación activada una hora al día (nada recomendable, porque agotaríamos la pila o acumulador muy pronto), el panel EL dejaría de ser útil nada menos que en 80 años, por supuesto, mucho más que la vida de muchos de nosotros, y que la vida, probablemente, del mismo reloj. Luego de 40 años de uso del panel EL una hora al día, no habríamos alcanzado ni la mitad del tiempo de duración del panel, sino que tan sólo lo habríamos estado usando durante 14.600 horas. Y ¿quién activa durante toda una hora la iluminación de su reloj, cada día? Obviamente, casi nadie.


Tecnologías EL: Indiglo y Electro Luminescence Backlight
Actualmente los dos líderes en relojes digitales son los que poseen dos de las tecnologías más comunes en iluminación EL: Timex, por su parte, posee Indiglo, y Casio, por la suya, posee Electro Luminescence Backlight. Indiglo es una marca de Indiglo Corporation, propiedad de Timex, que comenzó a utilizar tecnología EL en el Kmart del año 1992, dentro de su línea Ironman.

Por su parte, la ElectroLuminescence de Casio es otra tecnología del fabricante japonés en respuesta al Indiglo de Timex. Casio la lanzó al mercado en el año 1995, y el primer reloj en ofrecerla fue un DW-5600E (la letra «E» corresponde precisamente a la tecnología Electroluminescence). Debido a ello, a este modelo se le conoce comúnmente también como «Foxfire», ya que su iluminación verdosa recordaba a ciertas especies de hongos con características de luminiscencia (bioluminiscencia, en este caso). Casio le puso ese apodo para el mercado local japonés, mientras que para la exportación le acuñó el término «Illuminator» (aunque «Illuminator» también lo usa la marca en relojes de LED).

| Redacción: Zona Casio