
Con la crisis tan acuciante que hay, con tantas personas (en éste y en otros continentes) que no tienen nada que llevarse a la boca, ¿es lógico, e incluso lícito, que Casio nos venda ahora relojes a precios tan desorbitados como 1.000 y 6.000 euros?
No somos los únicos a los que nos ha llamado la atención el ver cómo un reloj, por el simple hecho de «cubrirlo» de titanio y decir que es una edición especial -me estoy refiriendo al GW-T5030, como ya habrás sospechado-, salga al mercado por más de mil euros. Pero si Seiko o Rolex lo hace, ¿por qué Casio no puede?

Digamos las cosas claras: Casio no te vende un reloj (ni Seiko los de Star Wars, por ejemplo), lo que te está vendiendo es el derecho a llevar una edición única. Lamborghini, Ferrari, y todas las marcas de lujo lanzan habitualmente ediciones similares, de una ridícula cantidad de unidades, no pensando en que se vendan con la mortadela o el chorizo en los grandes almacenes, sino entre tiendas seleccionadas o VIPS, y a unos clientes muy particulares.
Creo que sería más justo criticar a Casio, o ponerle el grito en el cielo, si de buenas a primeras lanzara el GW-T5030 para el público en general y a ese precio. Incluso puede que vendieran muchos, pero sería un precio injusto para un reloj que no lo vale. Salvo que sea en edición extraordinariamente limitada, como en este caso ocurre.

Para los demás, para los que pisamos suelo de piedra y tierra cada día (y no parquets bursátiles) tenemos auténticos «regalazos» de Casio: el DW-5030 de tapa roscada, el atractivo GD-350, o el más humilde aún (pero guapísimo y cautivador) W-215, todo un guiño a los DW de las variantes HD de antaño. Todos estos -y muchos más de este estilo- forman parte de una franja de precios lo suficientemente variada para que nadie se quede sin «su» reloj. Porque resulta muy llamativo que precisamente en los 30 años de G-Shock Casio lance al mercado un modelo tan parecido a esas cajas como el del W-215. Lógicamente, no iban a decir que el W-215 es un reloj «homenaje» a G-Shock, pero en la práctica ¿qué es, más que un guiño a esos relojes de los que este año se celebra el 30 aniversario?
Si eres multimillonario, adelante, concédete un auténtico capricho y lánzate a por el GW-T5030C sin pensarlo. Si no llegas a tanto, tienes el DW-5030C, que tampoco está nada mal (y todas las ediciones 30th, que son muchas, no las olvidemos). Pero si ni siquiera puedes llegar a ello, seguro que sí podrás llegar al W-215. Casio (y no lo hace ninguna otra marca, y no es porque en este blog nos dediquemos precisamente a tratar esos relojes, es porque es verdad) piensa en todos, y para todos tiene su modelo.

Soñar es gratis, y tal vez muchos soñemos con poseer un GW-T5030C en nuestras muñecas, pero también sabemos que no sería moralmente ético comprarlo a ese precio. En edición limitada es como mejor está.
Por cierto, y sin que tenga mucho que ver con el tema, ya corren rumores por algunas páginas japonesas de un futuro DW-T5030C. ¿Se convertirá en realidad? De Casio todo se puede esperar.

| Redacción: Zona Casio