
Con la llegada de los relojes Bluetooth, Casio actualizó su sistema de vibración, haciéndolo más pequeño, con menos efectos secundarios sobre la circuitería (debido a ese movimiento de vibración) y con una mejora en la transmisión de sus vibraciones al activarse, haciéndolo gracias a todo ello mucho más útil.
En Zona Casio llevábamos tiempo queriendo publicar los dibujos técnicos de desarrollo, y hoy finalmente podemos hacerlo, usando como referencia el GB-6900 (GB-6900AA). Es una buena oportunidad, además, para verle «las tripas» técnicamente al interior de estos modelos, algo que no ocurre muchas veces. El motor va anclado a un armazón del módulo mediante un adhesivo de doble cara que impide que se mueva, aislado de la circuitería principal y «sentado» sobre un material absorvente de impactos. Las razones de todos estos elementos son varias. Por una parte, preservar al propio motor de daños ante eventuales caídas o golpes, y, por la otra, aislar también de los efectos nocivos de las vibraciones al «corazón» del reloj y su parte más sensible.

La vibración la lleva a cabo un rotor que gira excéntricamente, causando una descompensación de peso cuando gira al pasar la electricidad. Respecto al material absorvente, éste puede ser silicona, o uretano, y trabaja como una unidad con la tapa trasera y la caja del reloj. Cuando la tapa se cierra y se aprietan los tornillos, empuja éste material, que, a su vez, comprime la cápsula del motor de vibración, fijándola en su sitio.

La vibración se transmite a la parte superior de la carcasa, que la transmite al cuerpo y al resto del reloj. Gracias a la presión realizada por el material absorvente, se mejora la vibración y se favorece una mayor dispersión. Dicho material, además, también transmite las vibraciones a la parte inferior del reloj a través de la cubierta. Al ser un material elástico, permite que las vibraciones se dispersen hacia la parte de fuera y no se dirigan hacia la circuitería ni hacia el oscilador de cuarzo, elementos de los que se encuentra aislado.



| Redacción: Zona Casio