
O mucho nos equivocamos, o te digo yo que va a ser así. Y es que apunta a aspectos de G-Shock que son muy populares y que gustan mucho, como los dorados, la moda urbana, el ser llamativo y muy, muy brillante. De hecho, pienso que por qué no habrá lanzado este modelo G-Shock hace ya mucho tiempo, más aún, debería haberlo realizado usando de base no el DWE-5600, sino el DW-6900, que se amolda más a ese estilo.
Lo bueno es que el pack de venta de esa edición especial incluye tres correas, una de ellas convencionales, junto con su bisel (es un DWE, es decir, posee cambio rápido de bisel), con lo cual puedes pasar de esta edición tan «cantosa» para salir a tomar cervezas (o al parque con el patinete, si no tienes aún edad), y luego colocarle su tradicional «traje negro» para ir al cole o al trabajo. Genial, ¿verdad?

La verdad es que estéticamente el reloj está muy bien conseguido, con ese display amarillo, esa capa de pintura brillante, y ese frontal de diseño un tanto hindú (aunque en realidad son eslabones de cadenas) que lo inunda todo. Se trata del DWE-5600HG, de la serie Carbon Core Guard, un reloj del que tuvimos noticias hace poco pero del cual aún no había fotos ni filtración alguna (hoy ya sí). Se distribuirá, a priori, a nivel global (aunque China será el primer país en tenerlo), aunque está por ver si llegará o no a Europa, a un precio que rondará peligrosamente los 250 € (teniendo en cuenta que el DWE-5600 Kashiwa Sato de edición especial rondaba los 240 €, con este acabado casi es lo que cabría esperar, después de todo).
Por cierto, que fíjate en el pack de venta, también con esos dorados brillantes…, ¡si es que parece una caja de bombones! La pena es que no incluya como extra una cadena dorada también, porque si así fuera sería «la repanocha» y los raperos fliparían.






